Cómo Ir Tras Tus Sueños Cuando Sientes Que Nadie Te Apoya

Hoy es un día de remolino emocional! En un momento estoy volando a mi país Ecuador a ver a mi familia después de casi 5 años de ausencia!

Te preguntarás por qué dejé pasar tanto tiempo… y aunque la historia es larga, la respuesta corta sería que: cuando salí de mi país renunciando al camino establecido por la sociedad para encontrar el mío, esa decisión atentó contra la única forma conocida de “alcanzar el éxito” de mi familia (sí, justamente esa aburrida vía que ninguna oveja negrísima como yo quiere caminar…)

Por lo que fui muuuy incomprendida (se puede decir que mi locura los volvió locos), por lo que tuve que ausentarme un tiempo mientras gestaba mi camino, organizaba mis locas ideas de fusionar espiritualidad y dinero, pasión y trabajo, servicio y prosperidad y todo lo aquello que el status quo te dice que es “imposible” fusionar…

Y por eso hoy en nuestro #MiercolesLegendario quiero hablarte de esto, porque tal vez si eres algo como yo, tienes muchos sueños, le pides más a la vida, has sido la denominada “loca” de la familia y sientes que NO tienes el apoyo que te gustaría para alimentar tus ideales!

Si es así, eres guerrera de mi misma calaña y AMARÁS este episodio!

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Lee aquí la transcripción de este episodio:

Hola guerrera bienvenida a otro miércoles legendario. Hoy estoy muy emocionada con la temática que vamos a cubrir, cómo ir tras tus sueños cuando sientes que nadie te apoya.

Estoy segura que estos tips te van a ayudar muchísimo si has atravesado un momento de incomprensión como estos, y si los has atravesado quiero felicitarte. Por que sabes? Todas las personas inconformistas e insatisfechas con las reglas establecidas, con el camino que sigue el rebaño, la gente que le ha pedido más a la vida, que se ha salido del status quo; cada una de ellas han sido incomprendidas. Muchas han pasado un lapso donde nadie estuvo a su lado, entendiendo sus sueños y el ideal que querían cumplir.

Lucha por tus sueños, ellos son los que te abrirán la puerta a la vida que estás destinada a vivir.

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Quiero que sepas algo: Nunca, nunca vas a poder ser tú misma si constantemente estás intentando ser parte de un enjambre. Nunca vas a poder vivir tu grandeza y saber de qué realmente estas hecha si constantemente quieres ser como los demás, solamente por no sentirte sola. La soledad muchas veces es el precio que tenemos que pagar por ser diferentes, es decir por ser nosotras mismas. Y esta es la realidad, cuando te encuentras en un momento así, tienes dos opciones:

La primera es tratar de convencer y enfocar tu energía explicándole a tus seres queridos, a tu familia, a tus amigos, a las personas de las que sientes que necesitas el apoyo, a que te comprendan y te apoyen. Venderles la idea de que ir tras tus sueños vale la pena. Que estos sí importan y cómo su apoyo podría contribuir a que tu puedas lograrlo de mejor manera. Esa es tu primera opción, aun que la verdad es que esperar la aprobación externa por lo que tu voz interna te pide hacer, tal vez no es lo más recomendable. Muchas veces la aprobación externa es una necesidad innecesaria que tenemos, cuando en el fondo, todos sabemos que tenemos todo lo necesario dentro de nosotros para lograr ese sueño.

Y la segunda opción y la que me parece más sabia es, quitar el enfoque de la incomprensión, del no apoyo, independizarte de esa necesidad de aprobación y enfocar esa energía que estabas invirtiendo en convencer, en explicar y argumentar a tus seres queridos, redirigirla a la gestación de tu sueño, utiliza esa energía para ir tras tus sueños. Hacer realidad ese ideal y dejar que los hechos hablen por ti, dejar que el tiempo te absuelva. Porque después de todo, lo que tú logres es lo que hablará de ti. La persona en la que te conviertas será tu mejor argumento, y sí, muchas veces la soledad es el precio a esto.

Yo recuerdo todavía cuando salí hace casi cinco años de mi casa, renunciando a todo, dejé la universidad, dejé a mi familia, mi estilo de vida, mi círculo social, todos mis hábitos; renuncié a ellos por ponerme una mochila al hombro y salir en busca de mi ser, de mi propósito de la persona en la que yo me quería convertir, porque me sentía atrapada en una rutina sin sentido, en reglas establecidas por otros, y en una vida que no era mía al fin y al cabo, que me la habían impuesto.

Y cuando mi alma me reclamaba incesantemente cada noche que la vida era mucho más que lo que estaba viviendo en ese momento, y nadie más me escuchaba, nadie más comprendía e incluso mis seres más queridos me llegaron a llamar mediocre, por que me rehusaba a conformarme con la vida que estaba llevando. Me llamaban mediocre por ser inconformista y tuve que pagar el precio de la soledad, recién ahora estoy a punto de volver a ver a mi familia después de casi cinco años.

No intentes ser comprendida, enfócate a gestar tus sueños y deja que tus resultados hablen por ti

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Tal vez mi situación sea un poco más radical porque yo dejé todo, abandoné todo, renuncié y salí de mi casa, de mi país, para aventurarme y tener nuevas experiencias y encontrarme de esa forma conmigo misma, por lo tanto si estás atravesando un momento así mi mejor consejo es que lo vivas por completo, te enfoques en tus sueños.

¿Qué prefieres tú? Ir tras tus sueños, ser acompañado por tus sueños hoy, o por las personas que te impiden cumplirlo, por que después de todo, cuando hagas realidad tus sueños vas a poder estar acompañada de esos dos, y estoy segura que mañana, cuando tus seres queridos se den cuenta de que es lo que querías lograr te digan: lamento no haberte comprendido, ahora sé qué es lo que querías hacer y ahora estoy contigo.

Y tu objetivo después de todo no es demostrar a tus seres queridos que sí pudiste, que valía la pena que tu sueño era grande, que tú tenías la razón. Tu objetivo es cumplir tu misión, vivir tu grandeza, dejar la huella que estás llamada a dejar. Y si en este momento todavía no has compartido cuales son esos grandes ideales que quieres lograr a una familia o un círculo cercano que sabes que no te puede comprender, no lo hagas. No compartas tu sueño, yo no lo hice.

Hace poco cuando llegué a los 20.000 fans en Facebook recién mis padres se enteraron y recibí la primera llamada de mi padre a felicitarme por ello. Y fue ahí que se dieron cuenta que era todo por lo que yo dejé, todo por lo que hice, decisiones que tomé y el acumulo de acciones que hice para llegar al punto donde estoy de poder servir, de sentir que cumplo mi misión y vivir bajo mis definiciones de éxito, prosperidad y felicidad que antes era imposible que ellos comprendan, así que comprende que no te comprenden.

Cuando estamos recién naciendo, recién gestando nuestro sueño es tan vulnerable, es tan pequeño que muchas veces si no te sientes lo suficientemente fuerte no vale la pena que lo compartas, porque después de todo ya tienes suficiente con luchar contra ti misma, contra tu miedo, tu mente, con que no eres suficientemente buena, que no vas a poder, con el miedo a fracasar, a quedar en ridículo, y con toda tu lucha interna de lograr tu sueño como para lidiar también con la desaprobación ajena.

Si tienes un sueño pequeño que está gestando, que recién es una idea, no lo compartas, que sea tuyo, que sea íntimo y enfócate en vivirlo y hacerlo crecer y en caso de que te sea posible crea una tribu de contención, personas que se conviertan en tu familia energética, que puedan escucharte y darte una mano cuando lo necesites o simplemente que se conviertan en tu botiquín de primeros auxilios existenciales, cuando ya no puedas más y necesites un respiro. Reorganiza tus prioridades, da prioridad a lo que realmente es importante, la aprobación externa no es más importante que tu misión, no es más importante que tu llamado a ser, que la grandeza que te está pidiendo vivir tu alma.

Cultiva tu sueño, géstalo y cuando sea fuerte sácalo al mundo y deja que él hable por ti, y sólo así podrás ir tras tus sueños y no sentirte sola porque en realidad nunca estamos solos. Pero esos lapsos que tenemos de incomprensión son los que nos hacen más fuertes y más poderosos y es lo que te va a permitir mañana poder alcanzar cimas más altas.

Espero que estos tips te hayan servido y no olvides de seguir luchando por ir tras tus sueños por que ellos son los que te abrirán las puertas a la verdadera vida que estás llamada a vivir.

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No olvides dejarme tu comentario sobre qué te pareció este episodio y cuál es tu historia de loca incomprensión! Estaré encantada de leerlo en cuanto pise tierra firme de nuevo!

Escucha el podcast de este episodio AQUÍ!

 

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